“Agustín presentaba dificultades para leer y se debían a la enseñanza que había tenido en un colegio anterior, en el que no demostraron mucha preocupación por que aprendiera a leer, solo le enviaban guías, a diferencia de lo que pasó este año, en el que la ayuda de la Fundación se unió a la de su escuela y se convirtió en el apoyo que yo deseaba para mi hijo y para mí, que con esta oportunidad me liberé de la inmensa presión que sentía por el aprendizaje de Agustín.
El cambio con la profesora del Rescate Lector Remoto que le enseñó a leer en las sesiones se notó inmediatamente una diferencia importante, Agustín se sintió cómodo y feliz, logró una buena comunicación con ella, quien le demostró mucho cariño, lo que no había sucedido antes. Eso provocó un cambio muy grande en su actitud y ganas de aprender, mejorando con el tiempo su comprensión lectora y su entusiasmo por conectarse a las clases de lenguaje y comunicación con su profesora Paula; clases en las que leían bastante y hacían que participaran todos los niños y a las que Agustín sabiendo ya leer, no quería perderse.
Estoy agradecida del programa, de la posibilidad que le dieron a Agustín de aprender con cariño, porque para mí fue una ayuda muy importante. Si el próximo año tuviésemos la oportunidad de participar nuevamente del programa lo aceptaría con mucho gusto porque no sé si van a volver a clases presenciales y yo lo único que deseo es que mi hijo avance y que realmente tenga buenas calificaciones, sobre todo en lenguaje porque sabemos que sabiendo leer todo lo demás es más fácil”
Ruth Huenolpán
Apoderada Rescate Lector Remoto
Cinthya Covarrubias,
Periodista,
Encargada de Comunicaciones Organizacionales Fundación AraucaníAprende