“A lo largo de mi vida me he enfrentado a diferentes desafíos que integran el encuentro de personas vinculándose con propósitos en común, por lo que cada vez que se me presenta el desafío de participar en proyectos de construcción de aprendizajes me siento ansiosa de saber qué es lo que va a ocurrir.  Tener la oportunidad de conocer a docentes que se están preparando para obtener mayores herramientas en su labor pedagógica y poder acompañarlos en ese viaje, es un honor para mí y una gran responsabilidad, la que intento llevar como un tesoro valioso.

He descubierto en mi propio ejercicio de la pedagogía y en la exploración, investigación y observación de los procesos de aprendizaje, que los docentes somos facilitadores de aprendizajes. Más que enseñar, acompañamos a otros seres humanos en el descubrimiento de sus aprendizajes y talentos. Dado esto, la importancia radica en convertirnos en verdaderos maestros de la observación, de la escucha y del acompañamiento de nuestros estudiantes en esos procesos de aprendizajes individuales y colectivos, los que son perfectos y que viven cada uno a lo largo de su vida en la escuela; todo esto desde el amor, la comprensión y la aceptación de su individualidad.

Mi mayor motivación en participar como facilitadora de este diplomado es poder acompañar a mis colegas docentes en su desenvolvimiento desde la reflexión y el descubrimiento de la docencia como un arte que integre la sensibilidad y las emociones en ese proceso tan complejo que tiene que ver con el desarrollo de la lectoescritura; acompañarlos a conocer y aplicar el modelo que propone el diplomado de una forma armónica, reflexiva y consciente. Comprender que no es un proceso mecánico sino más bien orgánico, en el que pueden vincular sus propias experiencias de vida con los nuevos aprendizajes que están adquiriendo en esta formación.

Ser parte de este proyecto está siendo una gran oportunidad para mí, con mucha alegría y satisfacción puedo decir que todas las personas con las que he tenido la oportunidad de vincular estamos con un propósito en común y tiene que ver con nuestros estudiantes. Con brindarles mayores oportunidades de desenvolvimiento, preparándonos para entregar nuestros conocimientos de una forma amable, amorosa integrando no sólo lo técnico, sino también el considerar a nuestra niñez como parte de ese proceso, no dejándole fuera de su proceso de aprendizaje, sino más bien poniéndole como un protagonista, como siempre ha debido ser”.

Natalia Castillo,
Docente Facilitadora Diplomado Fundación AraucaníAprende