Enfrentándose a la lectura grupal y construyendo relatos llenos de emoción, el equipo del Programa Rescate Lector vivió una experiencia diferente y enriquecedora, al participar del taller de escritura creativa convocado por Araucanía en 100 Palabras; el que con una exitosa convocatoria logró reunir a las Profesoras Rescatistas que dieron vida al Programa en sus inicios y a quienes hoy enseñan a leer a niños y niñas de la región. 

“El objetivo es que las participantes puedan expresar por medio de la escritura sus experiencias y conocimientos de La Araucanía, siguiendo las bases del concurso para crear relatos de no más de 100 palabras; con la intención de profundizar en sus experiencias como mujeres que han estado ligadas al mundo de la educación a lo largo de sus vidas”, explicó Fernanda Neipil, moderadora del taller creativo de Araucanía en 100 Palabras 

El taller se desarrolló con una participación activa de todos los presentes, siendo evidente el talento y el entusiasmo por transmitir las vivencias que plasmaron durante la actividad para el concurso. Así fue, como la Rescatista Sonia Coñoman compartió parte de su vida en su relato, “llegaba el mes de septiembre y mi madre abnegada mujer recibía muchas costuras que se mandaban a hacer para fiestas patrias. Ahí ella cocía hasta llegar las 2 ó las 3 de la mañana, con su bracerito y una velita encendida o muchas veces con un mechero marfil. Eran tiempos de mucho sacrificio y por qué no decirlo de escasez”. 

Otro de los relatos que emocionó fue el de la psicopedagoga Francisca Riquelme, “vamos a escuelas rurales, vamos a la U, nos ponemos el uniforme y somos flores de azul petróleo que abundan en Avenida Alemania, entre el Aiep y el hospital. Quiero creer que la educación se salvará, si no es así no moriré en paz. Psicopedagogía, alma de la enseñanza quiero quererte”. 

 El taller hizo posible los reencuentros, esos añorados por quienes habiendo jubilado aún aman enseñar y anhelaban ver a sus compañeras del Rescate Lector. “El taller fue fantástico, nos reunió a todas las antiguas rescatistas, a las que hoy tenemos recuerdos maravillosos de los momentos en los que trabajábamos la lectura con los niños. Nos acercamos a Araucanía en 100 Palabras, dejando volar nuestra imaginación y soñando con las vivencias de nuestro barrio, de nuestra calle, con los olores de la fruta y el olor de la cocina a leña”, relató Ester Contreras. A lo que la rescatista Oriana Concha agregó “al leer el libro Araucanía en 100 palabras del 2023, me encontré con exapoderados y exalumnos, sentí un orgullo y felicidad muy grande al saber que yo les había enseñado a leer y que ahora, están ahí y son grandes escritores”.